- Dame tu libertad.
No quiero tu fatiga,
No, ni tus hojas secas,
Tu sueño, ojos cerrados.
Ven a mí desde ti,
No desde tu cansancio
De ti. Quiero sentirla.
Tu libertad me trae
[...]
una bandada de visiones
Que tú veías
Cuando en el colmo de tu libertad
Cerrabas ya los ojos.
¡Qué hermosa, tú, libre y en pie!
Si tú me das tu libertad me das tus años
Blancos, limpios y agudos como dientes,
Me das el tiempo en que tú la gozabas.
[...]
La quiero
Para soltarla, solamente.
No tengo cárcel para ti en mi ser.
[...]
La soltaré otra vez, y por el cielo,
Por el mar, por el tiempo,
Veré cómo se marcha hacia su sino.
-Pedro Salinas-
viernes, 23 de septiembre de 2011
¿O tan sencillo fue, tan sin esfuerzo, como una luz que se encuentra con otra luz y queda iluminado el mundo, sin que nada se toque?
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